Un niño de 8 años ha sido sometido a horribles actos de crueldad por residentes locales, quienes lo torturaron con tizones y cucharas calientes, dejándolo con quemaduras en todo el cuerpo. Además, fue encerrado y privado de alimentos durante semanas.
Actualmente, el niño se encuentra hospitalizado en el Hospital Regional de Veraguas, recibiendo atención médica por las graves lesiones que sufrió. Las quemaduras cubren gran parte de su cuerpo, junto con otras lesiones.
La madre del niño logró rescatarlo de sus captores, presuntos miembros de una secta que opera en la zona. Desesperada, lo llevó a través de la selva y las montañas durante más de seis horas hasta llegar a Santa Catalina, donde recibió atención médica antes de ser trasladado a otro hospital.
Las autoridades, incluido el Ministerio Público, han iniciado una investigación exhaustiva sobre el caso. El fiscal Superior de Veraguas, Luis Martínez, llevará el caso, que ha sido remitido a la Fiscalía Superior de Asuntos Indígenas en la provincia de Bocas del Toro.
Hasta el momento, no se ha informado sobre la detención de los responsables de este acto atroz, pero las autoridades están llevando a cabo investigaciones adicionales para encontrar a los culpables y llevarlos ante la justicia.
