El hijo del presidente Joe Biden, Hunter Biden, ha sido declarado culpable este martes de los tres cargos que enfrentaba por mentir sobre su consumo de drogas al comprar un arma. Un jurado del estado de Delaware emitió el veredicto tras una semana de testimonios y pruebas en el juicio penal.
Hunter Biden, visiblemente inexpresivo, recibió los veredictos de culpabilidad y se abrazó con miembros de su equipo legal.
Los cargos incluyen hacer declaraciones falsas para adquirir y registrar un arma de fuego, así como posesión ilegal de la misma, delitos que conllevan una posible sentencia máxima de 25 años de prisión y una multa de US$750.000.
El escándalo ha puesto a la familia Biden bajo los reflectores, siendo Hunter el primer familiar directo de un presidente en ejercicio en enfrentar un juicio penal.
Aunque los delitos ocurrieron antes del mandato de su padre, la repercusión política es innegable, especialmente de cara a las elecciones presidenciales.
La condena se espera para mediados de octubre, lo que podría impactar en la campaña de reelección de Joe Biden. Sin embargo, expertos consideran improbable que la sentencia cambie significativamente el rumbo de la campaña, aunque sí podría afectar emocionalmente al presidente y a su familia.
El periplo legal de Hunter Biden aún no ha concluido, ya que en septiembre enfrentará otro juicio por evasión de impuestos federales, lo que podría representar un mayor riesgo para el presidente Biden.
