Las nuevas generaciones de jóvenes enfrentan una serie de desafíos cruciales que definen su visión del futuro. Con un panorama global cambiante, los temas de mayor preocupación para los jóvenes de entre 15 y 24 años abarcan el empleo, la salud mental, la educación y el cambio climático.
De acuerdo con datos de la Organización de las Naciones Unidas, en 2024 hay 1,200 millones de jóvenes, representando el 16% de la población mundial, una cifra que se espera aumente al 24% para 2030. Este creciente número de jóvenes exige soluciones más equitativas y efectivas para los problemas que les afectan directamente.
Uno de los temas más urgentes es el empleo. Actualmente, los jóvenes constituyen el 25% de la fuerza laboral global, pero enfrentan una tasa de desempleo que supera el 13.5%, cifra que se eleva aún más en regiones como América Latina y el Caribe, donde la pandemia exacerbó la crisis laboral. Además, muchos jóvenes deben aceptar empleos informales con condiciones laborales precarias.
En el ámbito de la salud mental, la Organización Mundial de la Salud estima que uno de cada siete jóvenes padece de trastornos mentales, con la depresión y la ansiedad como los más comunes. La falta de atención adecuada puede tener consecuencias duraderas en su bienestar y futuro.
En cuanto a la educación, a pesar de los avances, persisten grandes desigualdades. Según la UNESCO, 62 millones de jóvenes no asisten a la escuela secundaria, y 138 millones no completan el bachillerato. Aunque las tasas de alfabetización han mejorado, aún hay 773 millones de adultos analfabetos, siendo la mayoría mujeres. La educación sigue siendo una herramienta crucial para superar la pobreza y asegurar el desarrollo.
Finalmente, el cambio climático es una de las principales preocupaciones. Una encuesta de Unicef revela que el 85% de los jóvenes encuestados en 55 países están al tanto del cambio climático y exigen acciones más firmes por parte de los gobiernos. Los jóvenes están liderando movimientos globales para abordar este problema, utilizando la educación, la tecnología y el activismo para impulsar el cambio.
La juventud global está profundamente comprometida con estos temas y busca soluciones efectivas para construir un futuro más justo y sostenible.