El cineasta israelí Yuval Abraham, laureado con el premio al mejor documental en la Berlinale, como se le conoce al Festival Internacional de Cine de Berlín, ha reportado amenazas de muerte dirigidas hacia él y su familia. Durante la ceremonia de premiación el pasado sábado, Abraham empleó el término “segregación” y abogó por un cese al fuego en Gaza.
Acompañado por el cineasta y activista palestino Basel Adra, quien co-dirigió el documental No Other Land, Abraham compartió sus preocupaciones desde el escenario. Adra instó a Alemania a detener el suministro de armas a Israel y expresó su desazón por celebrar el premio mientras continúa la violencia en Gaza.
“En dos días volveremos a una tierra donde la igualdad es solo un ideal lejano”, expresó Abraham durante su discurso. “Vivimos a una corta distancia uno del otro, pero mientras yo disfruto de derechos y libertades, Basel y muchos palestinos están atrapados en la ocupada Cisjordania. Este sistema de segregación debe cesar”, añadió.
Aunque el público aplaudió sus palabras, medios de comunicación y políticos alemanes las criticaron, acusándoles de mostrar solidaridad con Gaza sin reconocer las acciones violentas de Hamás y calificando su discurso de antisemita.
Abraham denunció que, tras las críticas, él y su familia fueron objeto de amenazas de muerte, lo que lo obligó a cancelar su vuelo de regreso a Israel.
“Una turba de derecha israelí se presentó en la casa de mi familia para buscarme, intimidando a parientes cercanos que tuvieron que huir en medio de la noche”, escribió el cineasta en un mensaje en redes sociales, atribuyendo la persecución a las acusaciones de antisemitismo.
Además, lamentó el “mal uso” del término por parte de políticos alemanes, que, según él, vacía de significado la palabra antisemitismo y pone en peligro a judíos en todo el mundo.
El documental No Other Land, realizado por un colectivo palestino-israelí, se proyectó en la sección Panorama de la Berlinale, recibiendo elogios por su enfoque responsable y preciso sobre la situación en Cisjordania.
Ante las críticas, el ministro de Justicia alemán consideró que la reputación de la Berlinale quedó dañada al permitir expresiones de antisemitismo sin tomar medidas al respecto. El gobierno alemán anunció una revisión de los incidentes y buscará el diálogo con los organizadores del festival.