La mañana del sábado, la Policía Metropolitana confirmó que encontró el cuerpo de Dylan Santiago Castro, el niño desaparecido el martes pasado, en la ciudad de Usme, al sureste de Bogotá.
“Estamos profundamente entristecidos por la muerte del menor Dylan Santiago y ofrecemos nuestras condolencias a su familia. Investigaremos el incidente”, dijo X en el relato policial.
El cuerpo fue encontrado en un campo junto a su casa en el pueblo de Kulvitar, cerca de la localidad de Sumapas.
Irónicamente, las autoridades, que antes enviaron un equipo de más de 150 personas (entre policías, militares y bomberos) a registrar la zona, no encontraron rastro alguno.
Mientras tanto, el alcalde Carlos Fernando Galán dijo en su cuenta X: “Lamento mucho esta noticia. Estoy seguro que la Policía de Bogotá y el Ministerio Público de Bogotá seguirán esclareciendo los hechos y determinando la causa de la muerte de Dylan Santiago Castro y las personas de las que siguen siendo responsables lo antes posible.
La madre de los niños, Darley Ulis, dijo al diario El Tiempo que no entendía cómo ocurrió la desaparición porque era un día normal y se encontraban realizando sus actividades diarias.
“Dejé a mi hijo un rato en la cocina, traje leña y le enjaboné la ropa. Pasaron cinco minutos, pero cuando regresé, el niño ya no estaba”, dijo la madre al despertar por la tarde.
Estaba sola con sus hijos en la finca donde vivían y no había nadie más en casa. Además, la casa del vecino más cercano está a 30 minutos andando.
Durante el día no había nada extraño o inusual en él, excepto que por la mañana el corazón de su perro latía, pero su madre no le prestaba mucha atención.
“No le presté mucha atención y simplemente interactué con el chico normalmente. Cuando tenía 12 años, le di de comer, lo preparé y luego, después de la 1:30 p. m., le dije: “Por favor, quédate aquí un rato”. Mientras te traigo leña. Y como lo tuve lo metí en Motico. ¿Qué es este juguete Motico? Los dejé allí y cuando regresé, mi hijo no estaba por ningún lado. Salí y lo busqué, pero no lo encontré por ningún lado. “Lo buscamos en la finca durante dos horas, pero no había nada y nadie podía decirnos por qué”, dijo.
La desaparición llamó la atención de las autoridades, que registraron los campos, embalses y fincas aledañas.
Otros familiares, incluido el padre del niño, dicen que no se llevaron al niño de la granja. “El padre niega tener el virus, pero estamos investigando porque no hay información”, dijo Darley.
