Una reciente declaración del Gobierno de Estados Unidos ha generado controversia en Panamá, luego de que anunciara que el país centroamericano había aceptado no cobrar tarifas a los barcos estadounidenses por el tránsito a través del Canal de Panamá, lo que representaría un ahorro de “millones de dólares al año” para la nación norteamericana.
El anuncio se dio en medio de las crecientes presiones del presidente Donald Trump por “recuperar” el control de la vía interoceánica, y llegó tras la visita del secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, a Panamá. Según un comunicado publicado en la red social X por el Departamento de Estado, Panamá habría tomado la decisión de exonerar del pago de peajes a los buques estadounidenses, algo que de inmediato generó reacciones en el país.
Sin embargo, poco después, la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) desmintió la afirmación del Gobierno de EE.UU. y aclaró que no se ha realizado ningún ajuste en las tarifas ni se han otorgado exenciones especiales a ninguna nación. La ACP, como entidad autónoma responsable de la administración del Canal, reiteró que tiene la facultad exclusiva para fijar peajes y que no se ha tomado ninguna decisión en ese sentido.
El anuncio de EE.UU. y la rápida aclaración de la ACP han generado especulación sobre la verdadera intención detrás del mensaje de Washington. Mientras algunos sectores en Panamá exigen mayor transparencia sobre las negociaciones entre ambos gobiernos, otros advierten sobre posibles intentos de injerencia en la administración de la vía interoceánica.
Hasta el momento, ni la Presidencia de Panamá ni la Cancillería han emitido un pronunciamiento oficial sobre este cruce de declaraciones.