En un movimiento que ha encendido las alarmas internacionales, Rusia anunció el inicio de ejercicios con armas nucleares tácticas cerca de Ucrania. Esta decisión, ordenada por el presidente Vladimir Putin, responde a lo que Moscú percibe como amenazas crecientes por parte de las potencias occidentales.
Ejercicios en el Distrito Militar Sur
El Ministerio de Defensa ruso informó este martes que “la primera fase de los ejercicios sobre la preparación y el uso de armas nucleares no estratégicas ha comenzado”. Las maniobras se están llevando a cabo en el distrito militar Sur, una región que comparte frontera con Ucrania. Según el comunicado oficial, estos ejercicios buscan verificar la disponibilidad y preparación de las armas nucleares no estratégicas para garantizar la integridad territorial y la soberanía del Estado ruso.
Declaraciones Oficiales
El presidente ruso, Vladimir Putin, había anunciado a inicios de mayo su intención de realizar estos ejercicios. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, justificó esta medida en respuesta a declaraciones del presidente francés Emmanuel Macron y otros altos funcionarios británicos sobre la posibilidad de enviar tropas a Ucrania. Peskov afirmó que tales declaraciones representan una “nueva espiral de escalada de la tensión” que exige medidas especiales.
Macron ha reiterado en varias ocasiones su disposición a enviar tropas a Ucrania en caso de que las fuerzas rusas rompan las líneas del frente o si el gobierno ucraniano lo solicita. Estas declaraciones han sido vistas por Moscú como una provocación directa y una amenaza a la estabilidad regional.
Detalles de las Maniobras
En esta primera etapa de los ejercicios, las unidades militares rusas están practicando la recepción de municiones especiales para los sistemas de misiles tácticos Iskander, su instalación en los misiles y el desplazamiento oculto a las posiciones de lanzamiento. Además, las fuerzas aeroespaciales rusas están practicando el emplazamiento de proyectiles especiales en aviones, incluyendo misiles hipersónicos aerobalísticos Kinzhal, y realizando vuelos a zonas establecidas de patrullaje.
Estas maniobras también incluyen la participación de la marina rusa y tropas estacionadas cerca de Ucrania. El objetivo es mantener el nivel de preparación de los efectivos y del equipamiento de las unidades de misiles tácticos para responder a cualquier eventualidad.
Reacciones Internacionales
Hasta el momento, los países occidentales no han emitido una reacción oficial al inicio de estos ejercicios. Sin embargo, cuando se conoció la intención de Moscú a principios de mayo, Estados Unidos calificó la acción como “un ejemplo del tipo de retórica irresponsable” que se ha visto de Rusia en el pasado. El portavoz del Pentágono, Pat Ryder, señaló que tales maniobras son “completamente inapropiadas” dadas las actuales tensiones de seguridad.
Implicaciones Estratégicas
Desde el inicio del conflicto en Ucrania en febrero de 2022, Vladimir Putin ha mencionado en varias ocasiones la posibilidad de recurrir a armas nucleares. El año pasado, Rusia revocó la ratificación del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBT), aunque mantiene una moratoria mientras Estados Unidos no realice pruebas nucleares.
Según fuentes estadounidenses citadas por el diario The Wall Street Journal, Rusia ha estado desarrollando un vehículo espacial para el transporte de un arma nuclear antisatélite. Este vehículo, denominado Cosmos 2553, fue puesto en órbita en febrero de 2022, poco antes de la invasión rusa a Ucrania.
El inicio de estos ejercicios con armas nucleares tácticas marca una escalada significativa en las tensiones entre Rusia y Occidente. Mientras Moscú justifica su acción como una respuesta necesaria a las amenazas externas, la comunidad internacional observa con preocupación los posibles impactos de esta demostración de fuerza. La situación exige una vigilancia constante y medidas diplomáticas para evitar una mayor escalada del conflicto.