El flujo migratorio a través del tapón del Darién ha experimentado una significativa reducción del 52% desde la implementación de nuevas medidas por parte del Gobierno panameño, según datos del Servicio Nacional de Migración (SNM). La disminución, que se ha registrado desde el 1 de julio, se debe a la instalación de alambres de púas bloqueando cinco trochas principales en la región.
Hasta la primera quincena de agosto, 5,388 personas han cruzado la selva del Darién, en comparación con las 11,363 que lo hicieron en los primeros 16 días de julio. Este descenso marca un avance notable en el esfuerzo del gobierno panameño para controlar el tránsito irregular de migrantes en esta peligrosa región.
La implementación de estas nuevas medidas, que incluyen el cierre físico de rutas de tránsito, ha sido clave para lograr esta reducción. El Ministerio de Seguridad de Panamá ha reportado que, si esta tendencia continúa, se podría alcanzar una reducción de al menos 100,000 personas para finales de 2024.
A pesar de esta significativa disminución, las nacionalidades predominantes entre los migrantes siguen siendo las mismas. Los venezolanos siguen encabezando la lista, con 3,318 personas en tránsito en agosto, seguidos por colombianos, ecuatorianos y haitianos. Aunque el flujo hacia rutas alternativas como la vía marítima a la isla colombiana de San Andrés continúa, la reducción en el Darién refleja el impacto positivo de las nuevas medidas de control.
El SNM también ha observado que, aunque las rutas marítimas ofrecen una alternativa, el número de migrantes en Panamá sigue siendo mayor en comparación con las cifras reportadas por Migración Colombiana en la isla caribeña.
La mejora en las estadísticas del tapón del Darién marca un importante paso en la gestión de la crisis migratoria y destaca el compromiso del gobierno panameño para enfrentar los desafíos asociados con el tránsito de migrantes a través de su territorio.
