El uso de la violencia policial en el Reino Unido está nuevamente bajo escrutinio después de que un agente fuese suspendido tras un video que lo muestra pateando en la cara a un joven reducido en el suelo en el aeropuerto de Mánchester. Este incidente, ocurrido el pasado martes, resultó en cuatro detenidos y tres policías hospitalizados, y fue calificado como “verdaderamente impactante” por la Policía del Gran Mánchester (GMP), que ha solicitado una investigación independiente del regulador de conducta policial.
El episodio generó una protesta pacífica el miércoles por la noche frente a la comisaría de la GMP en Rochdale, donde se cree que reside el agredido. Los manifestantes, en su mayoría condenando la conducta de la GMP, acusaron al cuerpo policial de “racismo institucional” con cánticos de “debería darte vergüenza”. La víctima de la agresión es musulmana, según medios británicos.
Ya esto se está saliendo de control se que ellos tienen que velar por la seguridad de su país pero así no